Bajo la figura de apremios ilegítimos, el organismo que vela por los derechos de las personas, insertó la acción judicial en contra de los responsables de agredir -tras un allanamiento- a una decena de convictos.
¿Qué pasó?
Con seis gendarmes suspendidos finalizó un incidente que se dio a conocer a través de redes sociales el pasado 27 de octubre, que daba cuenta de una brutal golpiza propinada por los funcionarios del Centro de Prisión Preventiva de la comuna hacia un grupo de internos.
Un equipo del INDH concurrió el mismo día que se dieron a conocer los hechos al recinto de Gendarmería, donde recabaron antecedentes para la posterior querella señalada, debido a las lesiones que sufrieron los presos.
Fue así, que la sede de la Región Metropolitana del Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH) presentó la acción penal por el delito de apremios ilegítimos u otros tratos crueles, inhumanos o degradantes, contra todos quienes resulten responsables de las vulneraciones difundidas por diversos medios.
Muerte de un recluso
La inspección se produjo, luego de conocerse la muerte de un individuo de nacionalidad ecuatoriana en un dormitorio de la torre 3, quien recibió diversas puñaladas. A raíz de esto se registró el allanamiento, cuyas imágenes fueron difundidas a lo largo del país.
El acontecimiento no solo dejó un muerto, sino también cuatro personas privadas de libertad debieron ser hospitalizadas, por presentar lesiones de diversa consideración.
Justamente una riña habría sido el motivo del operativo de Gendarmería que incluyó la golpiza y que, según la misma institución, “no se ajustó a su normativa para el uso de la fuerza (…) por lo que se instruyó un sumario administrativo”.
Reacciona directora del INDH
Para la directora del INDH, Consuelo Contreras, la situación ocurrida en Puente Alto “forma parte de la crisis carcelaria que existe en el país, donde el hacinamiento -constatado por el INDH en diversos informes carcelarios- propicia el conflicto entre internos, lo que se suma a las malas condiciones de habitabilidad en que viven día a día”, expresó.
Además, la directora condenó el actuar de los gendarmes, sosteniendo que “la tortura o cualquier trato cruel, inhumano o degradante no pueden ocurrir en las cárceles de nuestro país ni en ningún espacio de privación de libertad, por lo que llamamos a las autoridades responsables para que estas deleznables situaciones no vuelvan a repetirse”, añadió la autoridad.
