Carabineros solicitó formalmente al Poder Judicial modificar la manera en que hoy se realizan los controles de medidas cautelares domiciliaras a imputados en algunos de los puntos más peligrosos de la Macrozona Sur.
Lo anterior se sustenta en la preocupación de la institución por la integridad de los carabineros que asisten a los controles y que han sido atacados, especialmente, los tres funcionarios asesinados el pasado 27 de abril en Cañete.
El prefecto de Control y Orden Público (COP) de La Araucanía, coronel Pablo Olivares, aseguró, en conversación con La Tercera, que Carabineros ha recibido más de un millón y medio de solicitudes de control judicial, específicamente notificaciones, citaciones, medidas cautelares y medidas de protección.
“Ese cumplimiento genera una importante cantidad de horas de trabajo, que van en directo desmedro de nuestro rol de apoyo a las operaciones policiales de las unidades territoriales y servicios especializados institucionales”, afirmó el coronel.
Algunas alternativas que proponen desde la institución es realizar la revisión de cautelares a través de llamados telefónicos, conexiones telemáticas o que sean los propios infractores de ley quienes se tengan que dirigir a firmar en unidades policiales.
Opciones que tienen por finalidad “resguardar debidamente la seguridad y protección del personal de Carabineros de Chile y de toda la ciudadanía”, sentenció el prefecto de Control y Orden Público (COP) de La Araucanía.
