La organización de ayuda -que en abril cumplió 18 años de vida- necesita de más voluntarias para poder continuar con su abnegada labor.

El voluntariado de las Damas de Rojo nace en la comuna de San José de Maipo un 12 de marzo del 2001.  Ya son 18 años en que estas ejemplares mujeres entregan un servicio abnegado, brindando ayuda material y espiritual a los enfermos hospitalizados y servir de nexo entre estos y sus familiares internados en el Complejo Hospitalario San José (Pabellón Central, Pabellón Roosevelt y Casa de Salud).

Actualmente las Damas de Rojo San José cuentan con 7 voluntarias activas cajoninas y tres socias de apoyo que vienen desde la entidad hermana de la filial Puente Alto, quienes hacen turnos de dos a tres personas en la mañana y en la tarde.  

            Su actual directiva está presidida por María Estay Cabrera, la secretaria Guadalupe Navarrete y la tesorera Nancy Apablaza. Ésta se renueva cada dos años y se relaciona con el resto del voluntariado del país en el Congreso que se realiza en forma bianual en que se plantean las inquietudes de cada una de las filiales.

“Fue una señora que trabajaba en la Posta Central, doña Rosa Mesa, que vivió muchos años en el Cajón, quien trajo la idea de crear una filial de las Damas de Rojo en la comuna. Se puso en contacto con el Director de ese entonces del Hospital, y así fue como comenzó todo. En un principio, éramos cerca de 25 voluntarias”, señala a PALD  Guadalupe, una de sus socias fundadoras.

Doña Margarita Cofré, quien también se encuentra en la organización desde sus inicios cuenta que al Complejo Hospitalario llegan personas de situación vulnerable y gente de la calle, a quienes atienden con mucha dedicación y cariño. “Existe a la vez un sector de personas abandonadas, que si bien tienen tratamiento y hasta podrían irse a su casa, no lo hacen porque prácticamente  a algunos los van a dejar, olvidándose sus familias de ellos. Es algo muy triste”.

Ambas concuerdan en que para llevar a cabo su labor de ayuda, es fundamental el apoyo de sus familias, “sobre  todo el de nuestros maridos”, remarca Guadalupe.  “Sin ellos no nos podríamos haber conformado. Nos vienen a dejar, a buscar, nos ayudan a hacer las compras, etc. detrás de nuestro servicio, cumplen una función más anónima”, agrega.

VOCACIÓN DE SERVICIO, ELEMENTO CLAVE PARA NUEVAS SOCIAS

Hoy, las Damas de Rojo filial San José de Maipo se encuentran abocadas en una campaña para captar más voluntarias a la organización. “Actualmente somos 11  socias, y necesitamos llegar a las 15 por temas legales, para  funcionar de manera óptima. Por ese motivo necesitamos que más personas se unan a nuestra causa”, sostiene doña Margarita.

Consultada por el perfil que debe tener una voluntaria, explica: “Lo primero es tener vocación de servicio, eso es lo más importante,  así como amor al prójimo y muchas ganas de ayudar. Ésta es una una labor bien intensa la verdad (…) Para postular, se debe ser mayor de 18 años y saber leer y escribir. Acá se les hará una entrevista, y luego se someterán a una prueba con práctica de tres meses, para después de ese período aprobar, si es así el caso, su incorporación”.

Para mayores informaciones, puede llamar al +569 7911 6624

(Nota y fotografías edición impresa 2.8.19)