Este 12 de marzo la empresa cumple su primer centenario, hecho que ha sido posible gracias a los vecinos, que desde su fundación han permitido que Puente Alto y CMPC crezcan de la mano. Aquí un poco de su historia.

Era el 12 de marzo de 1920 y bajo Decreto Supremo 589 quedaba constituida la adquisición de la “Fábrica Nacional de Papel de Estraza i Cartón” por don Luis Matte Larraín, la que luego se llamó “Compañía Manufacturera de Papeles y Cartones”.

La empresa se instaló en estos años entre el paraje campesino de Puente Alto, rodeado de arroyos que alimentaban las casas de los colaboradores, y pasó a ser la productora de celulosa de madera más importante del país, luego de intentar un tiempo con la producción de esta materia prima a través de la paja.

Una inversión importante comenzó en los años posteriores para dar paso a maquinarias y grandes edificios que se levantan en el medio de esta comuna como uno de los principales símbolos de progreso industrial de la época. Así comienzan los primeros años dentro de la planta de Puente Alto, para consolidar lo que hoy es el lugar donde operan Corrugados (Chimolsa, Papeles Cordillera y Sorepa –la mayor recicladora de papeles y cartones de Chile-) del área de negocios de Biopackaging y Softys, que fabrica productos tissue como pañales, papel higiénico, toalla nova, entro otros.

El potencial de la empresa y su avance a través de estos 100 años, no podría haber sido posible sin el trabajo en conjunto con los vecinos de Puente Alto. Es por eso que desde sus inicios, la compañía ha desarrollado diferentes proyectos en beneficio al desarrollo de los vecinos de la comuna.

GRANDES INICIATIVAS

En sus inicios, la empresa contó con la ayuda de Ema Lanz, la primera visitadora social, que tuvo como rol conocer los problemas de los trabajadores, tanto materiales como espirituales, y tratar de darles solución.

Así, poco a poco ella fue organizando la población papelera –que comenzó a construirse en 1933- y creó una escuela vocacional a la que asistían mujeres y hombres a aprender a leer y escribir, además de otros oficios.

Por otro lado, una de las iniciativas de la empresa fue la creación del querido Estadio Papelero, que por años fue el centro de reunión de los puentealtinos, ya fuese en su famosa piscina –la que se transformó en todo un balneario- o posteriormente en sus canchas.

Muchas otras acciones y proyectos ha realizado CMPC a lo largo de estos cien años. Hoy en día algunos de ellos son el programa Escuela de Formación para el Ingreso a la Educación Superior (EFIES) que desde 2019 beneficia a estudiantes de III° y IV° Medio, ya sean vecinos o hijos de colaboradores de CMPC, que en conjunto con Formando Chile, busca entregar herramientas académicas y socioemocionales para mejorar las oportunidades de acceso a la educación superior.

También se llevó a cabo durante enero de 2020 el campamento de verano Ucelandia, el que benefició a un centenar de niños entre los 4 y 13 años con actividades recreativas y educativas durante sus vacaciones estivales.

En el ámbito deportivo, CMPC oficializó el año pasado el apoyo al equipo de baloncesto Puente Alto Basket, como auspiciador oficial, el que desde octubre pasado ha escalado a lo más alto de la Liga Nacional de Básquetbol.